En este 1 de noviembre, la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad de León se une con profundo gozo a la celebración de la Solemnidad de Todos los Santos.
Hoy no recordamos a los que se han ido con tristeza, sino que celebramos con alegría a la inmensa multitud de aquellos, conocidos y anónimos, que ya gozan de la presencia plena de Dios en el Cielo. Ellos son la Iglesia Triunfante, el faro que ilumina nuestro propio camino de fe.
Como cofrades, encontramos un sentido especial en esta festividad. Miramos a nuestra Madre. Ella, que vivió el dolor más profundo al pie de la Cruz, es ahora coronada como Reina de Todos los Santos. Su Angustia y su Soledad son el preludio de la gloria de la Resurrección, la misma gloria que hoy celebran los santos.
Que su ejemplo de fidelidad y la intercesión de todos los Santos guíen nuestros pasos, fortalezcan nuestra hermandad y nos ayuden en nuestro caminar diario hacia la santidad, meta a la que todos estamos llamados.
¡Feliz y Santo día para tod@s!

